lee este poema como cuando tenías ocho años
el día que yo me muera
dejaré de temer todo eso
la discusión amarga debajo de la puerta
la carta doblada y las golondrinas en los pies
en la cola de la montaña rusa
es imposible
dejarse llevar en el descenso
existe una duda
un tierno parentesis
no recuerdo nada tal y como lo he vivido